9.2.09

Más que un arma blanca... una palabra

Muchos de los problemas de la sociedad son la falta de comunicación, las suposiciones, tomarse las cosas personal...ya lo decía el doctor Miguel Ruíz en sus Cuatro acuerdos. Este tipo de detalles daña a quienes nos rodean y nos daña a nosotros mismos.
Entre tantas cosas es el hablar de otros cuando no están presentes, a quien no le gusta un ratito de chismorreo o criticar a otros sólo por diversión... creo que todos hemos pasado por esos momentos de debilidad.
Hoy me tragué mis palabras y me dejaron un sabor amargo, no hablé mal de nadie pero quizá toqué un tema delicado que además desconocía, por el simple hecho "nutrir" la conversación. Después recibí una queja discreta, de alguien quien me reiteró que no debía hablar de personas ausentes y menos si desconocía sus circuntancias... que además no eran buenas. ¡OUCH! gancho al hígado.
No me lo tomo personal.
Las palabras aunque inofensivas, son filosas y escurridizas, a veces llegan muy profundo si bien consolando o hiriendo.

1 comentario:

Anónimo dijo...

El don de la palabra es uno de los pocos que tenemos los hombres... y del que siempre abusamos.